¿Cuáles son los servicios notariales con coste fijo y cuáles con coste variable?

El coste de la intervención notarial se regula en el Real Decreto 1426/89, de 17 de noviembre, que aprueba el arancel notarial, sin perjuicio de otras disposiciones que establecen determinadas modificaciones del mismo.

Para determinar el coste del documento notarial el citado Real Decreto diferencia entre:

Documento sin cuantía. Es aquel documento en el que interviniendo el notario no se determina, ni es posible determinar, una cantidad que pueda ser objeto de valorar, o, si lo es, no constituye un objeto inmediato del acto contenido en el documento notarial.

Estos documentos tienen un coste fijo. Dentro de esta categoría se incluirían: testamentos, poderes (generales o especiales), poderes para pleitos, y actas y escrituras en general (de complemento de otras anteriores que hayan devengado derechos por cuantía), de aclaración, de subsanación y de rectificación.

Documento de cuantía. Se trata de documentos notariales donde sí hay una cantidad que se determina o se puede determinar, y que, generalmente, está sujeta al pago de un impuesto, ya sea el de Sucesiones y Donaciones, el de Transmisiones Patrimoniales, el de Actos Jurídicos Documentados o el de IVA.

En general estos documentos se refieren a escrituras de compraventa, de herencia o de préstamo con garantía hipotecaria.

El coste de estos documentos tiene un arancel regresivo lo que supone que a más cantidad de valor menos porcentaje por cuantía se percibe.

En ambos casos, documento sin cuantía y documento con cuantía, además del coste fijo y/o variable de cada documento indicado, se ha de sumar el resto de componentes del documento notarial: folios, copias, timbre y, en ciertos casos, documentación a añadir al documento matriz.

Aquí tienes información más detallada http://www.notariado.org/liferay/c/document_library/get_file?uuid=7ce87132-ac34-4475-a5be-e70137206086&groupId=10218